María Ángeles Lonardi es poeta, narradora, Profesora, Docente para la Formación Profesional y Correctora. Nació en Larroque, Entre Ríos, Argentina y desde 2002 reside en Almería, Andalucía, España. De su obra se han publicado seis Libros entre los que destacan: Poemas para leer a deshoras, Letra Impar, 2017 y Soles de nostalgia, Círculo Rojo, 2019 (ambos traducidos al italiano) y “En el vértigo azul de una mirada”, Círculo Rojo, 2021. Aparece en más de cincuenta Antologías. Posee numerosos Premios literarios en Argentina, Italia y España y Premios Internacionales. Es Jurado de Concursos literarios. Ha sido traducida al italiano, inglés, quechua y guaraní. Participa activamente en Recitales Poéticos, Encuentros de Escritores, Jornadas Literarias, Presentaciones de otros autores, escribe Prólogos, Ensayos, coordina Antologías, realiza Talleres literarios y Reseñas literarias que publica habitualmente en numerosas Revistas Digitales. Integra Equipo Editorial en Revista Luz cultural, Todoliteratura y Revista literaria De sur a Sur. Es miembro de prestigiosas Instituciones culturales: IEA Instituto de Estudios Almerienses, CAL Centro Andaluz de las Letras, AIHS Asociación Internacional Humanismo Solidario, ACE Asociación Colegial de Escritores y aparece en BECA Biblioteca de Escritores Andaluces Miembro del CITLS Consejo Internacional de Todas las Sangres con sede en Perú. Miembro de la Academia Norteamericana de Literatura Moderna Internacional. (ANLMI) Miembro Honorario de PAZ IFLAC Latinoamérica, Foro por la Paz y la Cultura 2020-2021. Embajadora de la Paz para WWPO WorldWide Peace Organization por Andalucía. Miembro del CERCLE UNIVERSEL DES AMBASSADEURS DE LA PAIX / Suisse & France, por Argentina. Directora de IFLAC ESPAÑA 2021. Directora de Paz Arte y Cultura Pax España. Socia colaboradora del Club de Pechina para UNESCO. Su trayectoria literaria, en su propio blog: https://letras-sobre-papel.blogspot.com.es/.
DESTINO
Cuando el mundo enmudece puedo oírme
en su silencio. Y lejos de toda algarabía
donde las preguntas buscan respuestas
aun no sabidas,
una visión puede cambiarlo todo.
Y en esa perspectiva
de líneas y de curvas
palpas la clara suavidad del agua,
percibes la serenidad del cosmos,
sientes la calidez del sol encima
y admiras la alegría del navegante
cuando llega a la orilla.
Detrás de todo aliento
siempre hay un vuelo azul que se inicia.
Olvidamos lo que realmente importa
y nos perdemos en el bosque
seguros de encontrar la salida.
¿Dónde el amor que guió tus pasos?
¿Dónde la fuente de la sabiduría?
¿Dónde los valores que te humanizan
que te definen y te identifican.?
Estas hecho de contradicciones.
Eres vulnerable, volátil y frágil
como la llama o como la ceniza.
Mientras, la humanidad sigue su curso
como un río que fluye,
tú te dejas arrastrar por corrientes
como si nada hubieras aprendido
o si el problema no fuera contigo.
Detente. Escucha el silencio que tiene
mucho que decirle a tu corazón
de león herido.
Mira el mundo con mirada de niño.
Y en la noche oscura recuerda el sol
que fue nuestro, en medio del invierno,
como el árbol que florece de nuevo
celebrando la vida, soñando
un mañana de amor, de paz y esperanza.
Aunque tengamos las horas contadas,
aunque del cielo solo caiga la fría
escarcha, la lluvia que lava culpas
aunque no sepamos nada del misterio
y sea ir a tientas nuestro destino,
en busca de la otredad que va en fuga
hacia el abrazo humano y definitivo.
“En el vértigo azul de una mirada”, Círculo Rojo, 2021.
BAJO EL BURKA
Miro hacia abajo. Me vuelvo a mirar los pies.
La única parte de mi cuerpo liberado.
Mis pies tapados, no pueden hacer ruido.
Me vuelvo a mirar mis manos bajo el manto.
Desplegada la jaula de algodón
cae sobre mí y cubre mis escombros.
No hay fotografía que resista,
que muestre real mi deterioro.
Me consumo puertas adentro.
Me enfermo, tiemblo, sufro
y eso que, a solas, a veces lloro.
No hay espejo que devuelva mi tristeza
que refleje el dolor que raudo
corre sin sentido por mis venas.
No hay palabra que te diga no,
que cambie tu pensamiento,
que detenga los ataques, que aniquile el miedo.
Nosotras lo soportamos, nosotras lo sabemos.
Estamos aquí, bajo el burka,
guardando absoluto silencio
como quieren ellos,
los que no quieren pecar,
ni tentarse al vernos.
¡Cómo negarnos! Si nos va la vida en ello!
Los gritos se nos han hecho nudos
que tragamos con angustia y rabia
mezclados con impotencia y desconsuelo.
Algún día alguien oirá…
Algún día alguien mirará
y encontrará bajo estas telas
sueños rotos, anhelos y palabras esqueleto.
Nosotras aguardamos silenciosas
como rosas que, aun marchitas,
perfuman y exhalan libertad
entre las piedras y la sangre,
cautivas, en este absurdo jardín.
(inédito) 17 de Agosto 2021.
EL VÉRTIGO AZUL DE TU MIRADA
Detenida, la vida permanece
en el vértigo azul de tu mirada.
Se me escapan las fuerzas,
las palabras me faltan.
Creo que, no he conocido
más dolorosa y salvaje intemperie,
como aquella que suele visitarme
cuando cierras los ojos
en frugal parpadeo.
Los versos nuevos son como los pájaros
que vuelan libres, luego,
cruzan todos los puentes
derrotando misterios
y dibujan el mapa del derroche.
Lo sé, miedo me da
esta avaricia con que ahora mido
procaz, cada rizada hora sin ti.
Puede mi cuerpo torpe, ensimismado,
marchito, ya de vuelta
de locas travesías,
subyugarse con tu esencia y caer
en este y a cada instante. Confieso,
me faltan las palabras
para decir qué siento piel adentro.
El silencio de la noche es testigo
de este fiero tormento.
Dentro, cada latido es demasía,
es algarabía este parpadeo,
es ternura la luz y es este beso,
nuevo perfil del sueño
del que no quiero despertar jamás.
Un remolino desconsiderado
me absorbe, me desviste
y se hace el epicentro,
el ojo oscuro, insolente huracán
por donde raudas huyen,
acotadas mis pobres esperanzas.
Aun mermadas mis posibilidades
me atrevo, trato de encontrar la clave
que descubra el misterio
del que tus ojos supieron hablarme.
Luego, me domina la incertidumbre,
cuando torpemente voy a buscarte.
Entonces, me descubro vulnerable.
A pesar de saber de tu existencia,
es apenas un parpadeo tuyo
el que me hace caer
por el precipicio definitivo
y me sobra, el universo todo.
Del libro “En el vértigo azul de una mirada”, Círculo Rojo 2021.